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Naciones Unidas
Mandatarios centroamericanos pidieron el martes respeto a la soberanía de sus países ante la Asamblea General de Naciones Unidas, en respuesta a los reclamos desde el extranjero de que en naciones como Guatemala y El Salvador se socava la democracia con acciones de sus gobiernos.
Estados Unidos es uno de los principales países que ha criticado lo que considera un debilitamiento de la democracia en Guatemala y El Salvador, aunque ha sido más cordial con el gobierno de la presidenta hondureña Xiomara Castro.
Washington exige más acciones a esos gobiernos para frenar la migración de miles de centroamericanos que huyen de la pobreza y la violencia en sus países. Estados Unidos también atribuye la raíz de la migración a la corrupción en la región.
Algunos organismos han denunciado que también ven con preocupación el retorno de regímenes autoritarios en una región que hasta hace poco más de tres décadas fue escenario de varias guerras internas que dejaron miles de muertos y desaparecidos.
El presidente salvadoreño Nayib Bukele, quien recién anunció que buscará la reelección pese a que la Constitución de su país lo prohíbe y es criticado por un prolongado régimen de excepción para combatir a las pandillas, tomó casi los 10 minutos de su discurso para defender sus acciones y llamar a la defensa de la soberanía de las naciones.
Acompañado de su esposa y su pequeña hija, Bukele usó una metáfora de dos vecinos, uno rico y uno pobre, para ejemplificar lo que según él pasa con las críticas que recibe, donde un vecino poderoso no deja que el vecino pobre “mejore y limpie” su casa.