Mar. Oct 15th, 2024
  • Granjeros de Moca y Mineros de Bonao son los finalistas del torneo.

Carlos Moreta

Santo Domingo

La Federación Dominicana de Béisbol y la Liga Dominicana de Béisbol Profesional acordaron esfuerzos en conjunto para la creación de la Liga Dominicana de Verano (LIDOVE), celebrando su primer torneo en el año en curso, mismo que ha pasado por desapercibido.

Desde el 29 de agosto se ha llevado a cabo el primer calendario de la recién instaurada LIDOVE, contando únicamente con la presencia de seis equipos del Cibao. En la presentación de este circuito, Vitelio Mejía, presidente de la LIDOM, declaró que de cara a siguientes campañas se agregarían otras organizaciones, dejando a entrever las expectativas de expansión a futuro.

Bajo el marco de la primera temporada de la liga, calar en la opinión pública se ubica, desde ya, como el principal reto del evento, circuito que ha contado con una reducida presencia en medios tradicionales o electrónicos.

El 18 de septiembre la página de Instagram @CrunchTimeMLB elaboró una encuesta para medir el impacto del torneo, publicación en la que mayoría de comentarios admitían no haber visto ni siquiera un partido del certamen veraniego.

Esta desconexión con la afición beisbolera del país implanta un gran reto entre los organizadores de la Liga de Verano en busca de mercadear el circuito y crear simpatía con la larga fanaticada del juego de la pelota y el bate.

Establecer una liga profesional representa en sí un alto costo y tiempo, norma de la que no escapa la Lidove, justa que recién inicia e intentará conseguir consumidores de su producto a toda costa, un proceso que no sucede de la noche a la mañana.

Así como vender la liga a la afición local, lidiar con el pésimo estado de las infraestructuras deportivas del territorio nacional para brindar una experiencia agradable es otro reto en el camino de la Lidove, circuito que en su primera temporada ha sido efectuado en estadios a la vista deficientes y de mal estado.

Desarrollar una industria independiente al béisbol de las Grandes Ligas debe estar llamado a ser un compromiso de quienes rigen la pelota local, escenario bajo el cual se necesita una Liga de Verano con todas las de la ley.