- Las llamas y el humo se elevan desde la base de superpetroleros de Matanzas mientras los bomberos trabajan para sofocar el incendio, que comenzó durante una tormenta eléctrica, en Matanzas, Cuba, el 8 de agosto de 2022. AP.
EFE
La Habana, Cuba
El incendio forestal de grandes proporciones que desde hace 16 días afecta una zona montañosa de la provincia de Holguín (este de Cuba), está controlado aunque no extinguido tras quemar 5.347,5 hectáreas de bosques, informaron este lunes medios estatales.
“En estos momentos existe un control, con riesgos identificados, del incendio forestal. Aún no se extingue completamente, pero producto a la acción constante de personas valerosas, se avanza por buen rumbo”, indicó el periódico oficial regional Ahora.
“El peligro se mantiene, por lo que se insiste en lo imperante de la vigilancia extrema”, añadió el reporte.
Un informe emitido en la televisión estatal refirió que todavía quedan bastantes focos, aunque “existe un mejor control en la zona”.
Asimismo, señaló que “no se van a desmovilizar las fuerzas” que combaten el fuego integradas por personal de los cuerpos de bomberos y guardabosques, empresas agroforestales y las Fuerzas Armadas.
Las autoridades del Cuerpo de Guardabosques (CGB) han explicado que este incendio forestal se originó como consecuencia de la fuerte sequía que afecta al país, la existencia de materia combustible, las irregularidades del terreno, la dispersión de los focos, y los fuertes vientos que han favorecido la propagación de las llamas.
Una valoración preliminar arroja pérdidas en la biodiversidad con perjuicios importantes en el área devastada por el siniestro, donde abundan valiosas especies de la flora y fauna autóctona de la región oriental cubana.
En 2022, Cuba reportó 284 incendios forestales que afectaron más de 1.800 hectáreas de bosque, el mejor registro de los últimos tres años, y de ellos el 90 % fueron provocados, según datos del Cuerpo de Guardabosques.
El origen de buena parte de estos desastres se atribuye a las quemas no autorizadas de hierbas o caña de azúcar, el empleo de vehículos sin malla matachispas y también la actividad de los cazadores furtivos.
El período crítico de incendios forestales en la isla abarca del 1 de enero al 31 de mayo, coincidente con la época de mayor sequía.
Para este año, según estimados oficiales y por índices de frecuencia, se prevén de 320 a 445 incendios forestales, que pudieran dañar de 4.300 a 6.000 hectáreas en el período de enero a mayo próximo.