Santo Domingo, RD 

Los milagros parecen estar sobrevolando la ciudad de Pittsburgh.

Como nadie pudo haber predicho, el inicio de la temporada de Grandes Ligas está marcado por un suceso con características de utópico: los Piratas lideran toda la Liga Nacional con récord de 16-8, lo que se hace posible gracias a resultados como su diferencial de carreras anotadas sobre las permitidas de +25.

Nada sale mal en el camino de los comandados por Derek Shelton, quienes han logrado un reluciente éxito de 9-4 en victorias y derrotas fuera de casa, mientras que superan los enfrentamientos sostenidos frente a equipos con porcentaje de ganados por encima de .500 (4-2).

Han sido una total antítesis de sus últimas zafras, sacudiéndose luego de tener 201 reveses de manera combinada entre el 2021 y 2022.

El camino difícil será mantener la foja que actualmente contemplan, contando con una calidad de producción que, en caso de mantenerse, les podría conducir por senderos florecientes.

Los bateadores de los Piratas han estado pegándole a la pelota justo como se debe. Han logrado posicionarse en el tercer lugar de conexiones fuertes (bolas bateadas con velocidad de salida superior a las 95 millas por hora) con 44.7 %, seguido de estar sextos en Barrels con 10.1 %, que simbolizan los contactos óptimos que asignan mayor éxito.

Esto no pudiese ser posible sin la disciplina mostrada estando en la caja de bateo, quienes poseen un porcentaje de contactos con swings a lanzamientos dentro de la zona de strikes de 82.5, conjugado con solo tirarle al 24.9 % de los pitcheos fuera del cuadrante.

Las decisiones inteligentes conducen a buenos desenlaces

Desgraciadamente no todo brilla como luciérnagas en el anochecer, los cuales deberán superar retos en el camino como elevar la proporción de batazos en forma de líneas.

En otro apartado, el ritmo de la música con composición de gloria queda desentonado al observar la muestra de los lanzadores. Y esto pudiese ocasionar sucesos inesperados en el camino.

Los monticulistas de la franquicia presentan un pobre diferencial de enfrentamientos terminados en ponches por cada base por bolas de apenas 13.1 %, mientras la oposición ha logrado un promedio de .238.

Innegablemente, el nivel actual de los Piratas encanta, aunque lo joven de la temporada no nos puede llevar a confiarnos con un conjunto que tendrá que superar serios inconvenientes para mantenerse.