Gabriel Villanueva, fue sentenciado a 20 años de prisión por la muerte de su expareja, Andreea Celea, hecho ocurrido el primero de septiembre de 2018.
Santo Domingo, RD.
La Segunda Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia, convirtió en definitiva la sentencia que condena a 20 años de prisión a Gabriel Villanueva, por la muerte de su expareja, Andreea Celea, hecho ocurrido el primero de septiembre de 2018.
El tribunal presidido por los jueces Francisco Antonio Jerez Mena, Nancy Salcedo Fernández y María Garabito Ramírez, ordenó al secretario general de la Suprema notificar la presente decisión al juez de ejecución de la pena del Distrito Nacional y a las partes del proceso para los fines de lugar.
Los magistrados tomaron la decisión al rechazar un recurso de casación interpuesto por Villanueva Ohnona, contra la sentencia dictada por la Primera Sala Penal de la Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, el pasado 20 de abril de 2022, donde se confirmó la condena de 20 años de prisión dictada por el Segundo Tribunal Colegiado del Distrito Nacional.
El tribunal sostiene que, al no existir ninguna de las violaciones argüidas por el recurrente Villanueva Ohnona, en contra de la sentencia impugnada la cual a su juicio fue dictada con apego a los cánones convencionales, constitucionales y legales, procede rechazar el recurso de casación de conformidad con las disposiciones del artículo 427.1 del Código Procesal Penal.
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De modo que, considera que la pena de 20 años que le fue impuesta al privado de libertad resulta ajustada y suficientemente proporcional a sus actos, pues para esta corte Suprema el horrendo crimen que cometió comporta suficiente gravedad, no solo por la pena establecida por el legislador para quienes incurran en tan espantoso hecho, sino también por el perjuicio que le ocasionó a la madre de Andrea Celea, como también a su hermana y al resto de sus seres queridos.
Además, sostuvo la intención de atentar contra la sociedad en sentido general, la cual dedicó muchos esfuerzos para erradicar la violencia en el país. Y es que, “la violencia doméstica es un mal grave, pues deteriora al núcleo del cual depende la vida social en todo el mundo”.
De manera que la sanción impuesta le brindará a Villanueva Ohnona, la posibilidad de reflexionar sobre su conducta, de reeducarse y de reinsertarse en la sociedad en el futuro como buen ciudadano.
Asimismo, señaló que tal como razonó la Corte de Apelación el imputado es culpable de lanzar voluntariamente a la víctima por un balcón con la única intención de causarle la muerte, además de haber infligido contra ella violencias físicas y psicológicas no solo durante toda la relación sentimental que estos sostenían, sino también el día en que este decidió quitarle la vida.
