Sáb. Abr 27th, 2024

Beyonce publica su primer álbum ‘country’ el viernes, un proyecto que ha puesto de relieve tanto la larga historia de los artistas negros en este tipo de música como los esfuerzos por cambiar el relato de la industria. 

Beyoncé FOTO: INSTAGRAM

Nashville, Estados Unidos

¿Podrán triunfar los artistas negros en la música country, un feudo dominado por blancos? Julie Williams, una mestiza crecida en el sur de Estados Unidos que intenta triunfar en Nashville, la capital de este género musical, confía en que Beyoncé les abra definitivamente el camino.

Beyonce publica su primer álbum ‘country’ el viernes, un proyecto que ha puesto de relieve tanto la larga historia de los artistas negros en este tipo de música como los esfuerzos por cambiar el relato de la industria, dominada por blancos y hombres, para crear un Nashville más inclusivo.

“¿Quién está emocionado por el nuevo álbum country de Beyonce?”, grita Williams, de 26 años, durante su concierto, entre aplausos.

“Cuando ves a alguien que está en la cima de su arte y está arrasando, y tú piensas: “Vaya, ésa podría ser yo, es muy emocionante”, dice a la AFP.

Por eso, Williams cree que el álbum de Beyonce es un “momento histórico para llevar el country negro a primer plano”.

Williams es una de los cerca de 200 artistas asociados al Black Opry, un colectivo que lleva tres años presentando y amplificando las voces de artistas negros que trabajan en géneros como el country y el folk.

“Siempre he sido una gran aficionada a la música country, y siempre me he sentido aislada en esta experiencia. Especialmente como mujer negra queer, no se ve mucha representación, ni en los artistas, ni en los fans, ni en el material de marketing”, explica a AFP Holly G, fundadora de Black Opry.

“Cuando empecé con Black Opry, me di cuenta de que todos estamos en ello, sólo que no se nos da la misma plataforma ni las mismas oportunidades que a algunos de nuestros colegas blancos”, asegura.

RESISTENCIA AL CAMBIO

El nombre del colectivo es una referencia directa al Grand Ole Opry, el casi centenario espacio de actuaciones country cuya complicada historia ha estado marcada por intérpretes negros, pero que a lo largo del tiempo también ha destacado por artistas y líderes políticos vinculados a ideologías racistas.

La conversación en curso sobre la marginación de los artistas negros de música country ha cobrado nueva importancia tras el próximo álbum de Beyonce, dice Charles Hughes, autor del libro “Country Soul: Making Music and Making Race in the American South”.

La gente está diciendo: “Qué bien que Beyonce se pasa al country… aquí tienes un montón de otros artistas a los que deberías estar escuchando”, dice a AFP.

Hughes espera que “el efecto Beyonce” impulse a esos músicos y compositores del género que han trabajado con esfuerzo para “abrir puertas”.

El country es un estilo musical estadounidense por excelencia, con influencias africanas: el banjo, por ejemplo, surgió de instrumentos traídos a América y el Caribe por los esclavos en el siglo XVII.

Sin embargo, el country contemporáneo ha desarrollado una imagen abrumadoramente blanca, machista y conservadora, y los líderes de la industria se resisten al cambio.

A principios del siglo XX, la industria musical adoptó etiquetas para catalogar las canciones en los rankings de las más escuchadas, como “hillbilly” para la música hecha por blancos y “race records” para la música afroestadounidense, clasificaciones que más tarde evolucionarían como country y R&B, respectivamente.

“Esa separación inicial se basaba únicamente en el color de la piel, y no en el sonido de la música”, afirma Holly G.

Estas divisiones han sobrevivido, lo que significa que los músicos negros -y especialmente las mujeres negras, ya que para las artistas femeninas en general es mucho más difícil tener éxito en las radios country- se enfrentan a enormes obstáculos para entrar en la corriente dominante.

“La canción puede sonar exactamente igual que la de otras personas en la radio, y me dicen: ‘La tuya no es country'”, explica a AFP Prana Supreme, integrante del dúo madre-hija O.N.E. The Duo. Y yo digo: “¿Cuál es la diferencia?”.

VER PARA CREER

Hasta Beyonce se enfrentó a la resistencia de los poderosos de la industria, dice.

“Mi esperanza es que, dentro de unos años, la mención de la raza de un artista, en lo que se refiere al lanzamiento de géneros musicales, sea irrelevante”, declaró Beyonce recientemente.

Pero Holly G no se creerá que hay un cambio en la industria hasta que no lo vea: “Beyonce es una de las celebridades más poderosas del mundo. Y ha sido capaz de aprovecharlo para tener éxito en este espacio”.

“Pero creo que eso se debe a que la industria se siente intimidada por Beyonce”, advierte. “No porque estén abiertos a apoyar a las mujeres negras”.