Fue a inicios de julio cuando el Ministerio de Obras Públicas anunció que intervendría el paso a desnivel ubicado en el kilómetro 14 de la autopista Duarte, más conocido como “el Puente de la Sirena”, debido a las críticas condiciones en que se encuentra.

A la fecha, el lugar mantiene el mismo estado y hasta peor; con goteras, oxidado, rupturas, las varillas de la construcción colocadas desde hace años a la intemperie y sin iluminación, lo que ya ha provocado recientes atracos en la zona.

Este desnivel está ubicado específicamente al lado de una de las zonas donde se construye la extensión del Metro de Santo Domingo y próximo a un supermercado. Los moradores y quienes transitan con frecuencia en el lugar aún mantienen la esperanza de una ayuda, pues es el único camino que tienen para llegar a su destino, con el riesgo de que pedazos de este puente les puedan caer en algún momento encima.

En el momento en que denunció a través de un reportaje el estado en que se encuentra el sitio, las autoridades respondieron al llamado de que intervendrán el lugar, pero según los moradores, estos si fueron pero”nada más se pararon ahí a analizar, tiraron fotos, vinieron con un dron y ya”.

Cristian Lara, un vendedor de la zona que se ha mantenido al tanto de la llegada de las autoridades, dijo que estos solo fueron un día y que el puente día a día ha empeorado su condición.

Otros pobladores respaldaron lo dicho por Lara, “esos no han vuelto jamás en la vida”, haciendo referencia al personal de Obras Públicas.

Recientemente, la semana pasada un camión impactó con una parte del puente y tuvo que desmontar parte de su mercancía para poder pasar.

Los residentes cuentan que este tipo de situaciones suceden frecuentemente “ los camiones no ven la distancia”.

Cuando llueve se inunda

Agregaron que cuando llueve el agua sube hasta en los muros “aquí no hay alcantarillado”, lo que causa que las personas no puedan pasar, “mucho menos los vehículos”.

Aumentan los atracos

La falta de iluminación ha provocado que los delincuentes se apoderen del área a la hora de llegar la noche. Los residentes contaron que en esta última semana dos mujeres fueron víctimas de un atraco. La primera iba a bordo de un motor “hasta el motor se llevaron”, mientras que la segunda iba saliendo de su residencia hacia un hospital “le quitaron siete mil pesos”.

Las malas condiciones de este pueden se mantienen hasta la fecha, mientras que las autoridades aún no han cumplido su promesa de reparar el lugar.