Los precios del petróleo, la guerra en Medio Oriente y los nuevos desafíos de desaceleración mundial son solo una parte de los retos.

El nuevo Gobierno que se instalará por cuatro años más, como resultado de la reelección del actual mandatario Luis Abinader, tiene en sus manos el alcance de disposiciones que harían al país “paliar” el impacto de la incertidumbre que se registran en los mercados internacionales por múltiples causas.

Se tratará de medidas internas, comenzando con un aumento de la producción agropecuaria de bienes de consumo básico de la población y que hoy día están amenazados por altos costos de fletes ante un recrudecimiento de la guerra en Medio Oriente y el vaivén del precio del petróleo y combustibles blancos, alimentos y medicinas.

De asumir una autosuficiencia alimentaria para los más pobres y una capacidad exportadora que generen divisas se habría creado no solo un control de la inflación, sino también de la tasa de cambio y, de la paz social.

El país proyecta inversiones por más de US$4,500 millones para 2024. Los sectores de energía, turismo y minas priman ante estos anuncios, aunque todavía falta por ver qué sucederá con las exploraciones y posibles explotaciones de oro, cuyo precio ronda los US$2,500 la onza troy en los mercados internacionales.

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Como también, con los hallazgos escasos de petróleo, cuyo “commodity” mantiene una tendencia alcista y con posible exploraciones y explotaciones de “tierras raras”, en Pedernales.

Estas tres fuentes mineras pudieran “salvar” al país de futuras presiones internacionales, conjuntamente con las actuales ventajas que da el crecimiento del turismo al país.

Este martes, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) proyectó un crecimiento del PIB dominicano de 5.2% este 2024 y de 4.5% para 2025 y recomendó mantener ese liderazgo en la región ALC y también hacer frente a los desafíos.

Opinión de expertos

Miguel Collado Di Franco, vicepresidente del Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (CREES) afirma que el dato más reciente de la Refinería Dominicana de Petróleo (Refidomsa) es un hallazgo de 498 millones de barriles de los que son extraíbles un 74.3%, que es muy poco, ya que el país exporta en crudo y derivados 39.4 millones de barriles, y con eso todavía no tiene sentido explotarlo. Sobre tierras raras no hay mucha información, dijo Y, sobre el oro la perspectiva es que siga al alza y que la Reserva Federal (FED) comience a reducir las tasas de interés a partir de septiembre y se reduzcan los bonos de rendimiento.

“Lo más importante es que las mineras locales puedan aumentar la producción, particularmente la Barrick. Y si hay otros yacimientos que las autoridades den las facilidades para que puedan ser explotados”.

Collado Di Franco dice que el crecimiento de 5.2% del PIB proyectado por la Cepal es optimista y. no cree que pueda ser alcanzado, sino un 4% a 4.5%, por la incertidumbre ante la posible reforma tributaria y qué pasará en la economía estadounidense en los próximos meses. Indicó que habrá que esperar si las autoridades flexibilizan la política monetaria porque eso ayudaría,

Antonio Ciriaco Cruz

Para el decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la UASD, Antonio Ciriaco Cruz, la economía dominicana recuperó su senda de crecimiento potencial en el primer semestre 2024. Si se mantiene ese ritmo de crecimiento y no se alteran las condiciones geopolíticas, la economía dominica terminará con un crecimiento entre 5.1% y 5.3%, con niveles de inflación en la meta de inflación del 4% y un mercado de trabajo en la vecindad de 5 millones de ocupados.

Dice que la estabilidad macroeconómica y política inducen a recibir este año unos US$4,600 millones en Inversión Extranjera Directa. Y, que las exportaciones de oro puedan llegar a los US$1,600 millones si se aprovecha los altos precios de este mineral. “De manera que, este año 2024 la economía dominicana puede recibir alrededor de US$39,000 millones por ingresos por exportaciones nacionales y de zonas francas, turismo, inversión extranjera directa y remesas de la diáspora. Además, se pueden abrir nuevos caminos para nuevas fuentes de divisas con los hallazgos de cuencas petrolera y las tierras raras”.