El desvelo del Borussia Dortmund por sus lesionados se ha disipado y el técnico Edin Terzić confía que, salvo dos jugadores, tendrá a todos dispuestos para enfrentar al Paris Saint-Germain en la ida de las semifinales de la Liga de Campeones.
Terzić confirmó el martes que el lateral izquierdo Ramy Bensebaini y el juvenil delantero Julien Duranville se perderán el encuentro del miércoles. Pero el resto de los que estaban bajo algodones podrán jugar tras perderse la derrota 4-1 en Leipzig por la Bundesliga el sábado.
Además, Emre Can e Ian Maatsen estarán descansados tras cumplir suspensiones el pasado fin de semana.
“Marcel Sabitzer y Donyell Malen pudieron entrenar ayer”, indicó Terzić. “Donny no pudo participar en todo. Marcel se siente mucho mejor y estaba muy contento. Sébastien Haller pudo participar en parte del entrenamiento y vamos a ver cómo sale todo en el último entrenamiento. De momento, creemos que todos estarán disponibles para mañana”.
El atacante Haller arrastra una rebelde dolencia en el tobillo izquierdo.
Tras haber eliminado al Atlético de Madrid en la ronda previa, el Dortmund vuelve a cruzarse con el PSG. Se midieron en la fase de grupos, donde los alemanes perdieron 2-0 en París y luego sacaron un empate 1-1 en casa para quedar como primeros de la llave.
El Dortmund mantiene un invicto en sus últimos 10 partidos como local en el torneo europeo y volverá a persignarse al aliento de su hinchada — el afamado “muro amarillo”.
Pero Terzić tiene claro que el PSG, que el fin de semana atrapó su 12do título de la liga francesa, sale con la desesperación de proclamarse campeón de Europa por primera vez para justificar más de una década de una inversión colosal por partes de sus dueños de Qatar.
“Es un equipo que ha sumado mucha calidad, es un equipo que se reforzado en años recientes para ganar la Liga de Campeones”, señaló Terzić. “A lo mejor al inicio de la temporada no estaban muy bien, pero siempre sacan sus resultados, tal vez sin el nivel que se habían imaginado. Pero han mejorado mucho”.
El PSG llega liberado de la presión tras su resonante victoria sobre el Barcelona en los cuartos de final. Y muestran una versión más pulida en lo colectivo bajo el primer año de Luis Enrique como técnico.
Los parisinos ganaron la liga francesa en las últimas dos temporadas, pero se fueron a casa en los octavos de final de la ‘Champions’ con Christophe Galtier el año pasado y con Mauricio Pochettino en 2022.
“Lo bonito de estar aquí es disfrutar, de un partido muy especial, un campo diría único en Europa y tener la posibilidad de dar una alegría a la afición clasificándose a la final”, dijo Luis Enrique. “Eso es lo que nos hemos ganado con los partidos anteriores y eso es lo que vamos a intentar de disfrutar”.
Terzić estima que el equipo de Luis Enrique ha alcanzado su plenitud en el momento ideal.
“No es fácil poder con ellos, pero cada equipo lo intenta”, señaló. Kylian Mbappé, por ejemplo, con su calidad excepcional, ha anotado 43 goles en 44 partidos. Los rivales se pusieron como objetivo no permitirles que les lastimase en 44 partidos. No siempre se puede evitarlo”.
Y no pueden concentrarse exclusivamente en Mbappé.
“Si te centras sólo en Mbappé, entonces tienes a Ousmane Dembélé o (Gonçalo ) Ramos, o Vitinha, o (Achraf) Hakimi, o (Randal) Kolo Muani y el resto”, añadió Terzić. “Tienen una calidad increíble”.