Con el apoyo adecuado y las estrategias correctas, es posible marcar la diferencia al transitar por este ciclo natural de la mujer. El secreto está en una combinación de atención médica, una dieta equilibrada, ejercicio regular y cuidado emocional.
CELESTE PÉREZ Santo Domingo
Aporte. Con el apoyo adecuado y las estrategias correctas, es posible marcar la diferencia al transitar por este ciclo natural de la mujer. El secreto está en una combinación de atención médica, una dieta equilibrada, ejercicio regular y cuidado emocional.
La menopausia, lejos de ser una etapa “oscura”, debe ser vista como una oportunidad para el autoconocimiento y el cuidado integral. Es un momento natural en la vida de la mujer que, aunque conlleva desafíos físicos y emocionales, también ofrece la posibilidad de adoptar hábitos de vida más saludables, fortalecer la autoestima y redefinir el bienestar personal. Este periodo puede ser un punto de inflexión para priorizar la salud, explorar nuevas facetas personales y establecer una conexión más profunda con uno mismo.
Esta fase de toda mujer marca el fin de su ciclo menstrual y su capacidad reproductiva. Generalmente, ocurre entre los 45 y 55 años, aunque puede adelantarse o retrasarse dependiendo de factores genéticos, de salud y del estilo de vida. La menopausia no sólo implica cambios físicos, sino que también afecta la salud emocional, mental y social de la mujer.
La ginecóloga Alfida Franco, la nutricionista Nazirber Maduro y la médico cosmiatra Mirna de la Cruz coinciden en que la información y el apoyo son esenciales. “Cada mujer es única y su experiencia de la menopausia también lo es”, enfatizan las especialistas durante una conversación con el equipo de Listín Diario, subrayando la importancia de un enfoque personalizado para cada mujer en esta importante fase de su vida.
Consecuencias físicas
La menopausia trae consigo una serie de cambios físicos debido a la disminución de los niveles de estrógeno. Entre los síntomas más comunes se encuentran los sofocos o bochornos, sudoración nocturna, sequedad vaginal, insomnio, alteraciones de la memoria, disfunción sexual, aumento de peso y la pérdida de densidad ósea.
La ginecóloga Alfida Franco señala que “la falta de estrógeno puede llevar a problemas de salud como la osteoporosis y enfermedades cardiovasculares”.
“Es importante aclarar que no todos los síntomas le pasarán a una misma persona, pero sí es importante tener conocimiento para buscar apoyo profesional ante cualquier alteración”, plantea la especialista.
Al referirse a los bochornos, que se caracterizan por una ola de calor percibida como sensación de fuego en la cara acompañado de palpitaciones, sudoración muy intensa y enrojecimiento de la piel, Franco recomienda que “lo mejor es tratar de tranquilizarse, respirar con calma y mantenerse hidratada”.
“La Terapia Hormonal Sustitutiva (THS) puede ser una opción para aliviar los síntomas más severos, aunque no todas las mujeres son candidatas. Debe evaluarse caso por caso, considerando los beneficios y los posibles riesgos”, afirma Franco.
Para la sequedad vaginal se recomienda el uso de lubricantes acuosos y estrógenos tópicos. “Existen otros tratamientos alternativos como colocar plasma rico en plaquetas y secciones de ultrasonido de alta intensidad como el HIFU, los cuales han resultado ser de gran ayuda”, agrega.
Otras sugerencias de la ginecóloga son los chequeos médicos regulares para monitorear la salud ósea y cardiovascular, practicar ejercicios como el yoga y el pilates para mejorar la flexibilidad y la fuerza muscular, además de reducir los síntomas de ansiedad y depresión asociados con la menopausia.
Alimentación y nutrición
La nutricionista Nazirber Maduro destaca la importancia de una dieta equilibrada para mitigar algunos síntomas de la menopausia. “Una alimentación rica en calcio y vitamina D es esencial para mantener la salud ósea. También es importante incluir alimentos como la soja, que pueden ayudar a equilibrar los niveles hormonales”.
La especialista plantea que “comer alimentos ricos en fibra es un primer paso para controlar los antojos y la acumulación de grasa (por lo que eliminar los carbohidratos no es la respuesta), muchas mujeres necesitan hacer un ligero ajuste para obtener proporciones más altas de proteínas y menos grasa, ya que estos nutrientes son esenciales para la salud ósea”.
Los lácteos bajos en grasa, los vegetales de hojas verdes, el salmón y otros pescados grasos son buenas fuentes de calcio. “Suplementos de calcio y vitamina D pueden ser necesarios si la ingesta dietética no es suficiente”, recomienda Maduro.
Además, hidratación para combatir la sequedad de la piel y las mucosas. Omega-3 para la salud cardiovascular y Magnesio para la salud ósea.
“Recordemos que durante la menopausia los niveles de varias hormonas disminuyen en el cuerpo de una mujer. La suplementación con dehidroepiandrosterona (DHEA) podría ayudar a aliviar estos síntomas al proporcionar un apoyo hormonal para los cambios de humor y disminución del deseo sexual”, puntualiza la nutricionista.
Cuidado personal
Para la médico Cosmiatra Mirna de la Cruz, la menopausia es una etapa ideal para que las mujeres se enfoquen en el cuidado y la salud de su piel, aprovechando el tiempo para establecer rutinas que promuevan la vitalidad y el bienestar cutáneo.
“La autoestima puede verse afectada durante la menopausia, y cuidar la apariencia física también ayuda al bienestar emocional. Este puede ser un momento perfecto para invertir en uno mismo, realzar la belleza natural y mantener una piel saludable y radiante”, comenta.
“Durante esta fase, los cambios hormonales pueden causar sequedad, pérdida de elasticidad y la aparición de arrugas”, explica. “Por lo que se hace necesario hidratar profundamente la piel, utilizar productos con antioxidantes y protector solar”.
La especialista recomienda considerar tratamientos específicos como peelings suaves y terapias de rejuvenecimiento, tanto faciales como corporales que ayuden a restaurar el posible impacto que produce en la piel la menopausia.
“Existen opciones como la radiofrecuencia, que sirve para estimular el colágeno, hidratar y reafirmar; la oxigenación facial, que aporta nutrientes proporcionando luminosidad, regeneración celular y retraso del envejecimiento, cada caso es particular y debe estar acompañado de productos enriquecidos de nutrientes para fortalecer la barrera hidrolipídica”, dice de la Cruz.