Sáb. Nov 9th, 2024

El resultado fue duro, pero nada comparado con el traumático incidente que sufrió el paradeportista a los cinco años, cuando fue con un amigo a un zoo cercano a su casa de China.

Ma Lin, atleta paralímpico.
Ma Lin, atleta paralímpico. Paralympics Australia

Los sueños de Ma Lin por convertirse en un pianista de renombre terminaron de forma agónica cuando perdió su brazo derecho, debido al mordisco de un oso, pero haciendo muestra de una sólida determinación, se ha convertido en uno de los rostros del tenis de mesa paralímpico.

El paradeportista de 34 años sumó cuatro oros Paralímpicos (tres por equipo y uno individual) y una plata (individual) para China desde Pekín-2008, antes de mudarse a Australia en 2017.

Tras haber cambiado de afiliación, ganó dos medallas de plata representando al país oceánico en los Juegos de Tokio y el sábado completó el medallero al colgarse el bronce, teniendo que conformarse con el tercer puesto tras caer a manos del francés Lucas Didier en el recinto de Puerta de Versalles, completamente lleno.

Ma estaba visiblemente molesto tras la derrota y tenía razones para ello, pues estuvo hasta en dos ocasiones por delante, antes de ser sometido por Didier.

“Es duro”, declaró el entrenador Alois Rosario a la AFP, hablando en nombre de Ma, quien no habla inglés. “Fue un partido duro”.

“Partía como favorito así que es duro en el mayor escenario, pero Lucas jugó de forma increíble hoy”, añadió.

El resultado fue duro, pero nada comparado con el traumático incidente que sufrió el paradeportista a los cinco años, cuando fue con un amigo a un zoo cercano a su casa de China.

“Pensaba que (el oso) era mi amigo, porque solía ir al zoo cada semana a alimentarlo”, declaró Ma a Australia’s New Corp en 2021. “Así que decidí acercarme y acariciarlo, pero supongo que no estaba de buen buen humor ese día”.

Ma atravesó las barreras de la jaula con su brazo, y el oso respondió mordiendo por encima del codo.

“Fue un shock, pero no lloré, ni una vez”, añade.

Largo camino por delante 

El cirujano salvo su vida, si bien necesitó amputar su brazo, pero para el joven solo había otra pregunta en su mente cuando se despertó después de la operación.

“Solo quería saber si podría seguir teniendo una novia de mayor”, dijo Ma, cuya afición es el buceo.

“Me respondieron (sus padres) ‘por supuesto’, así que estaba contento”.

El viaje que cambió su vida arrancó inspirado por el éxito de la delegación china en los Juegos Olímpicos de 1996, con 8 medallas (cuatro oros) en tenis de mesa. Pero tras haber sido diestro hasta el accidente, el primer obstáculo fue adaptarse a ser competente con su brazo izquierdo.

Esta decisión demostró ser excelente, con un juego vistoso y un servicio excelente. Las medallas han demostrado el amplio abanico de habilidades de Ma, cuyo viaje no termina en París.

Parafraseando a su héroe Arnold Schwarzenegger en la película ‘Terminator’, anuncia que “volverá”.

“Habla sobre Brisbane-2032, así que le queda por delante un largo camino”, dijo Rosario. “Se está volviendo mejor. Ha mejorado muchos aspectos de su juego”.

Rosario declara que Ma hace maravillas con la vida que ha tenido, y que busca seguir ampliando su estatus de leyenda y su medallero particular.

“Sigue en activo y le queda un largo camino por delante, espero”, dijo.

“Pero sí, ya ha logrado mucho en su vida sobre la mesa. Está acostumbrado a los altibajos, así que le queda mucho”.