La pieza legislativa fue depositada por la diputada Carmen Lidia Williams Benjamín, el pasado 17 de septiembre
SANTO DOMINGO, RD
La diputada por la provincia Samaná, Carmen Lidia Williams Benjamín, sometió un proyecto de ley que procura declarar patrimonio histórico y cultural de la nación, los hallazgos arqueológicos encontrados en el Monumento Natural Cabo Samaná.
La pieza legislativa fue depositada por Williams Benjamín el pasado 17 de septiembre para que sea colocada en la orden del día.
En su artículo primero, la propuesta establece la declaración de patrimonio histórico y cultural, específicamente, a los hallazgos encontrados en las áreas Abrigo de Daniel, Cueva Funeraria de Daniel y Abrigo de Dana, en el monumento natural Cabo Samaná y su zona de amortiguamiento, ubicado en la zona oriental de la península de Samaná.
La pieza señala que el Ministerio de Cultura deberá colocar una tarja en las inmediaciones de la bahía de Samaná, indicando los hechos que se produjeron en el lugar y su importancia histórica.
Además, ordena que las zonas declaradas estén sujetas a medidas especiales de protección y conservación, de acuerdo con las normativas vigentes en materia de patrimonio cultural y arqueológico.
En su sexto artículo, el proyecto señala que el Estado, a través de sus organismos, deberá promover y difundir el valor histórico y cultural de las zonas declaradas, fomentando la investigación y el turismo responsable.
De igual forma, en su artículo séptimo, se indica que “se implementarán programas educativos dirigidos a los habitantes de la provincia Samaná, con el objetivo de promover el respeto y la conservación de las zonas arqueológicas”.
El proyecto establece en su octavo artículo que quedará prohibida cualquier actividad que pueda dañar o alterar las zonas declaradas como monumentos arqueológicos, incluyendo la construcción, excavación no autorizada y el uso de materiales que puedan afectar su integridad.
Dentro de los considerandos para fundamentar el proyecto, la diputada plantea que la Ley número 318, del 14 de junio de 1968 sobre Patrimonio Cultural de la Nación, establece que “el Patrimonio Cultural de la Nación, se subdivide en patrimonio monumental, artístico, documental y folklórico; y forman parte del patrimonio monumental, los monumentos, ruinas y enterratorios de la arqueología precolombina”.
En tanto que la Ley número 41-00, del 28 de junio de 2000, que crea la Secretaría de Estado de Cultura, establece que “el patrimonio cultural de la Nación comprende todos los bienes, valores y símbolos culturales tangibles e intangibles que son expresión de la Nación dominicana, tales como las que poseen un especial interés histórico, arqueológico, antropológico, entre otros”.
La diputada señala en el cuarto considerando que el Monumento Natural Cabo, ubicado en la zona oriental de la península de Samaná, fue hogar de los primeros seres humanos que poblaron las Antillas hace más de cinco mil quinientos años.
Asimismo, en el quinto que las áreas denominadas “El Abrigo de Daniel, la Cueva Funeraria de Daniel y el Abrigo de Dana”, en la provincia Samaná, son lugares arqueológicos que forman parte de la memoria histórica del país por conformar el cementerio más antiguo que se ha encontrado en las Antillas, y que han sido objeto de importantes investigaciones arqueológicas debido a su relevancia histórica y cultural.
Además, que el Abrigo de Daniel fue utilizado inicialmente como lugar de residencia por los primeros pobladores de la región, conocidos como “Samaneses”, hace aproximadamente 5,500 años, según las investigaciones, convirtiéndose posteriormente en lugar un área ritual y cementerio.
También que “los restos humanos encontrados en este cementerio revelan la existencia de civilizaciones tempranas que desarrollaron actividades físicas, económicas y religiosas, con un alto nivel cultural y de organización social”.
Williams Benjamín consideró que es esencial la preservación de estos hallazgos para proteger la herencia cultural del país y permitir que se implemente las medidas adecuadas para la protección de estos recursos invaluables.
“La protección y conservación de estos hallazgos son esenciales para asegurar que las presentes y futuras generaciones puedan apreciar el legado histórico de estos lugares”, declara en la propuesta.
