Expertos citan el impacto de enfermedades más prevalentes y los desafíos que tienen los sistemas de salud frente a la salud femenina.
MIAMI, EEUU
El gasto de bolsillo en salud es más alto en las mujeres que en los hombres y sus diagnósticos de enfermedades complejas por lo general se hacen en etapas más tardías, generando impactos negativos en las familias y en los sistemas de salud.
Las razones están asociadas a muchas causas, entre ellas a que al menos cinco de las enfermedades más prevalentes y complejas son exclusivas o se presentan mayormente en mujeres, como es el caso del cáncer de mama, la esclerosis múltiples, el cáncer de cuello uterino, problemas visuales como la retinopatía, la endometriosis, síndrome poliquísticos y la manifestación distinta del cáncer de pulmón entre ellas.
A esto se suma que las mujeres tienen barreras adicionales y obstáculos que limitan su acceso oportuno a los servicios de salud, entre ellos vinculados a su rol de protectora y de cuidadora en la familia, lo que hace que con frecuencia releguen su autocuidado y visita al médico para un segundo plano.
Las reflexiones fueron expuestas por expertos en diferentes campos de la salud y la investigación que participaron como expositores en el evento “Roche Press Day”, que se desarrolló durante dos días en esta ciudad con el tema “Mujeres, Salud y Equidad”, en el que participaron periodistas, comunicadores y especialistas de la medicina de diferentes países, incluyendo a República Dominicana.
Los especialistas aseguraron que ese rol de cuidadora que se ha delegado a la mujer, hace que sus diagnósticos se realicen de manera más tardía y, por lo tanto, el inicio de sus tratamientos médicos no llegan en el momento oportuno, aumentando sus gastos en salud, con impacto en los sistemas de salud.
Citaron, además, que la mujer participa menos en protocolos clínicos de investigación, lo que limita su acceso a tratamientos innovadores de primera mano.
Los expertos, tanto en exposiciones individuales como en su participación en paneles, coincidieron en señalar que existen brechas de acceso a servicios médicos y que es necesario que los sistemas de salud, los tomadores de decisiones, las instituciones vinculadas al área médica y los especialistas de la salud, piensen en atención médica centrada en la mujer.
Afirman que, aunque la esperanza de vida en el sexo femenino es más alta que la del hombre, estás pasan más tiempo con mala salud, por lo que instaron a las mujeres a priorizar su salud y hacerse evaluaciones periódicas.
Durante la apertura del evento, Stephanie Sassman, líder del portafolio de salud de la mujer a nivel global para Gerentech/Roche, destacó que promueven iniciativas de alianzas dirigidas a la atención de las mujeres y mostró resultados de modelos comunitarios de salud centrados en ellas que funcionan en varios países, lo que ha permitido diagnósticos temprano de enfermedades, como el cáncer de mamá y útero.
Destacó que están comprometidos en elaborar medicamentos innovadores enfocados en la salud de las mujeres.
18% más en gasto
Asimismo, Claudia Restrepo Múnera, directora del Deloitte Health Equity Institute para América Latina, detalló los costos ocultos de no priorizar la salud de la mujer.
Divulgó resultados de una investigación en torno a brechas en las prestaciones sanitarias (Estudio Deloitte US), donde se destaca que las mujeres pagan 18% más que los hombres en gastos de bolsillo anuales.
El estudio destacó que las mujeres de 19 a 64 años en promedio pagan más de su bolsillo que hombres de la misma edad, incluso cuando se excluyen las reclamaciones de maternidad, pagan en promedio 266 dólares más al año.
En tanto, Valentina Sartori, socia y líder afiliada del líder Instituto de Salud McKinsey, destacó que hay un vacío entre la salud que se brinda al hombre y a la mujer, ya que el 90% de la carga en la salud está en la mujer y recordó que el 60% de los años saludables son entre 20 y 70 años, que son los más productivos.
Dijo que hay un 5%de enfermedades que son solo de mujeres y citó la endometriosis que afecta a una de cada 10 y que hay un 50%de posibilidades de un mal diagnóstico cuando la mujer esté presentando un ataque cardíaco, porque sus síntomas son distintos a los del hombre
Señaló que hay 10 condiciones médicas que tienen mayor impacto en el producto interno bruto (PIB) y de esas tres son sólo de mujeres.
Enfermedades que impactan
Las doctoras Carolina Sardi Correa, Flavia Nelson, María Clara Horsburgh y Melissa Juárez, participaron en el panel “Atención Centrada en la Mujer”, enfocadas en enfermedades que se dan prevalentemente en las féminas que se manifiestan de manera diferente, resaltando la esclerosis múltiple, la retinopatía y el cáncer de pulmón.
Destacaron que en mujeres con cáncer el gasto de bolsillo en salud se aumenta en un 30% y con relación al cáncer de pulmón llamaron a los médicos a pensar en ello cuando reciban una mujer con síntomas sospechosos, ya que en la mayoría de los casos se presentan en mujeres que no fuman, pero están cerca de personas fumadoras y en un 15% en aquellas que están expuestas a humo de segunda mano, por ejemplo cocinar con leña.
En torno a las enfermedades visuales, destacaron que cuatro de cada 100 personas tienen ceguera o problemas visuales y el 80% de los casos ocurre en países de renta baja, y de estos el 60% de los casos ocurre en mujeres, pero que los temas visuales están por lo general ajenos a las agendas de salud de los países.
Sobre la esclerosis múltiple destacaron que la mujer hispana presenta síntomas tres años antes que otros pacientes, como las europeas, y además con manifestaciones más incapacitantes. Además, su diagnóstico y tratamiento se retrasa más debido a los costos.
Propuestas
Entre los expositores y panelistas de diferentes países de la región, se hizo común el proponer que los sistemas de salud ofrezcan soluciones integrales que permitan reducir las evaluaciones completas en una sola visita al médico y educar a los pacientes y al personal de salud en enfermedades que afectan a la mujer y que se manifiestan de manera diferentes que en los hombres.
Además, de ampliar los tamizajes comunitarios para acercar los servicios de salud a las comunidades; que los sistemas de salud trabajen en el desafío de cerrar la brecha en garantizar el acceso, evitar la demora y adherencia al tratamiento; que los empleadores y aseguradoras rediseñen coberturas de beneficios para aliviar la carga para las mujeres y promover la equidad y el bienestar y que se trabaje en hacer conciencia sobre el cuidado de su salud.