Moradores aterrados por posibles inundaciones en Santiago producto del ciclón Rafael
Los residentes de las zonas vulnerables de la ciudad de Santiago dicen sentirse preocupados debido a la falta de orientación y apoyo de los organismos de socorro; la reciente alerta verde emitida por el Centro de Operaciones de Emergencias (COE) ha intensificado los temores de quienes habitan en áreas propensas a inundaciones, especialmente en días lluviosos.
La temporada de lluvias en Santiago no solo trae consigo precipitaciones, sino también una serie de desafíos para los residentes en zonas vulnerables.
Según el COE, la provincia se encuentra en alerta verde lo que implica un llamado a la precaución y a la preparación ante posibles eventualidades; sin embargo, muchos ciudadanos sienten que no están recibiendo la información ni el apoyo necesario para enfrentar esta situación.
Rafael Mercado, un residente de Villa Verde Abajo, expresó su preocupación al afirmar que las autoridades deberían visitar esa zona y orientar sobre cómo deben de prepararse para cualquier eventualidad; su llamado refleja el sentimiento de desamparo que muchos sienten en momentos críticos como este.
Los habitantes de Villa Verde Abajo, cerca del arroyo Gurabo, han compartido su angustia por la falta de atención de los organismos de socorro.
“Cada vez que llueve se convierte en un dolor de cabeza. No sabemos a quién acudir, nadie ha venido a orientarnos”, comentó Víctor Rodríguez, quien señaló que el único puente sobre la cañada, construido con madera vieja, es arrastrado por la corriente en cada crecida.
La cañada del Diablo, ubicada en la avenida Yapur Dumit, se ha convertido en uno de los lugares más vulnerables de la zona sur de la ciudad, especialmente durante la temporada de lluvias.
Los residentes de esta área han reportado recurrentes deslizamientos de tierra que arrastran viviendas, poniendo en riesgo la seguridad de sus familias. Sin embargo, aseguran que no han recibido orientación adecuada por parte de los organismos de socorro para enfrentar estas situaciones de emergencia.
Al visitar la cañada del Diablo, se observa con preocupación, cómo familias, incluyendo niños pequeños, juegan en las inmediaciones de un arroyo contaminado. Ignorando el peligro que representa, estos niños desafían la suerte y ponen en riesgo sus vidas al estar tan cerca de esta zona crítica.
Otro sector que también requiere atención urgente es El Fracatán, situado a pocos kilómetros del centro de Santiago.
Los residentes de esta comunidad expresaron su frustración, señalando que los miembros de la Defensa Civil suelen acudir al lugar solo después de que cesan las lluvias. Según ellos, sería más efectivo que los organismos de socorro visitaran la zona antes de que llueva, con el objetivo de informar a la comunidad sobre las medidas a tomar ante posibles eventualidades.
Los habitantes de ambas áreas hacen un llamado a las autoridades para que implementen medidas preventivas que protejan a sus comunidades de los riesgos asociados con las lluvias, y para garantizar la seguridad de sus familias.
Puntos críticos de vulnerabilidad
Entre los puntos más críticos en Santiago se encuentran las cañadas del Diablo y Burgos, el Hoyo de Bartola, El Fracatán, Gurabito, barrio Los Santos, La Javilla y Los Ciruelitos. Esta situación ha sido documentada en un informe publicado por la Defensa Civil, que destaca la necesidad urgente de una respuesta más efectiva ante las condiciones climáticas adversas.