Paul Mathiasen
Santo Domingo, RD
La reciente investigación realizada por este medio acerca de como funciona el “millonario” negocio de la compra de visas dominicanas por parte de ciudadanos haitianos, no resulto ser sorpresa para los legisladores fronterizos de distintas bancadas políticas.
Si en algo coincidieron todos los legisladores, es que se trata de una actividad que siempre se ha realizado a “escondidas” o “confabulando” con los cuerpos diplomáticos dominicanos en territorio haitiano, encargados de suministrar los visados.
Por un lado, el senador de Elías Piña por Partido de la Liberación Dominicana (PLD) Yván Lorenzo, dijo todo el negocio se puede calificar como una “fabrica de millonarios”, ya que tanto las agencias, como las autoridades diplomáticas, hace de estas ventas un “botín político” en los consulados instalados en Haití.
No obstante, Lorenzo fue más allá y comentó que desde hace un tiempo se viene informando de camiones haitianos que ingresan al país con “cartas de ruta” en los cuales suben empresarios originarios de ese país, pasan y permanecen en territorio dominicano, aunque tengan la visa vencida.
De igual manera, Lorenzo destacó que es cierto el tema de las gestiones que hacen los haitianos a través de “agencias” las cuales cobran hasta 600 dólares para conseguir una visa dominicana y que al final el dinero “va a los bolsillos de los funcionarios diplomáticos”.
En ese mismo contexto, el diputado de Independencia por el PLD, Gaddis Corporán, considero que se trata de un “secreto a voces”el negocio que hay “dentro del desorden” en Haití.
Dijo que no es para ellos ninguna sorpresa que durante el cierre de los consulados se hayan seguido entregando visas “sin ningún tipo de criterio” y que es de “doble moral” por parte del Poder Ejecutivo, el entregar visas sin ningún tipo de filtro y luego repatriar haitianos.
Mientras que el diputado por Dajabón del Partido Revolucionario Moderno, Darío Zapata, dijo que además del negocio que existen con las visas, también hay otras modalidades que han utilizado los haitianos para ingresar a territorio dominicano de manera “legal”.
En ese sentido, indicó que existe la práctica de usar el carné que otorga de la Dirección General de Migración entre varios haitianos ante el “parecido físico” que existe entre ellos.
Sobre esto, dijo que hay debilidades en la zona fronteriza con respecto a la identificación real de un ciudadano haitiano, argumentando que además del carné debería haber un registro biométrico que permita confirmar la identidad.
Sumado a esto, reiteró, al igual que sus colegas, las prácticas que llevan a cabo agencias “al margen el territorio consular” en las cuales se realizan los negocios con las visas dominicanas “actuando a las sombras o con conocimientos de las autoridades consulares, cuestión que entiendo que, de ser así, debería ser investigado y tomar acciones tal como lo dice lo manda la ley”.
Todos los legisladores fronterizos también coincidieron en que es necesario que las autoridades de Ministerio de Relaciones Exteriores (Mirex) tomen acciones para investigar y acabar estas prácticas.
Este medio buscó la reacción por parte del Mirex, pero no obtuvo respuesta alguna.
Investigación
La investigación realizada por este medio volvió a poner en evidencia lo que los legisladores llaman “un secreto a voces” o un “botín político” que consiguen las autoridades diplomáticas de turno.
El “jugoso negocio de las visas dominicanas en Haití” trajo al tapete una realidad conocida y denunciada constantemente por los legisladores fronterizos dominicanos, sin importar la bancada política.
Esto último, debido al impacto negativo que genera la llegada de miles de haitianos a sus provincias, al ser los puntos de conexión entre ambas naciones y por ende las zonas de impacto directo.
Dentro de la investigación se expuso la función de las “agencias de viaje” entidades que operan con protocolos irregulares y sobreprecios, que fungen como entes de recepción de pasaportes haitianos que, a cambio de altas sumas de dinero, son devueltos con una visa dominicana.
Según se pudo constatar en la investigación, y luego confirmado con distintos legisladores, los precios por una visa dominicana pueden alcanzar en la actualidad hasta 600 dólares en estas agencias, superando ampliamente el costo “oficial” que dan las embajadas.
Dentro de este último aspecto, la problemática reside en el propio Ministerio de Relaciones Exteriores, que posee distintos precios para adquirir la visa dominicana e inclusive las embajadas en territorio haitiano disponen de otros costos.
Para intentar regular esto, el senador de Elías Piña, Yvan Lorenzo, propuso en el año 2021 un proyecto de ley sobre funciones consulares que busca estandarizar las tarifas y las recaudaciones de los servicios consulares, pero desde el Senado no se le ha dado conocimiento.
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