Un programa procura crear conciencia de que el consumo de bebidas alcohólicas en cualquier etapa del embarazo puede ser perjudicial para el bebé, sin importar la etapa de la gestación y la cantidad de alcohol que se ingiera.

Un anhelo de quienes impulsan el programa para la prevención del Síndrome Alcohólico Fetal (SAF) siempre ha sido sensibilizar a empresarios y comerciantes sobre la necesidad de brindar apoyo a la campaña que ya se desarrolla con éxito en las maternidades del país.

El objetivo es crear conciencia de que el consumo de bebidas alcohólicas en cualquier etapa del embarazo puede ser perjudicial para el bebé, sin importar la etapa de la gestación y la cantidad de alcohol que se ingiera.

La meta de sensibilizar a los empresarios de la industria licorera y el comercio distribuidor comienza a rendir sus frutos con la colocación de mensajes en los negocios de expendio, para advertir a las mujeres sobre el peligro para sus bebés que representa el consumo de alcohol durante la gestación.

La tienda Sirena de la avenida Luperón ya ha colocado advertencias en ese sentido en las áreas donde se exhiben las bebidas alcohólicas.

Un mensaje en esa tienda con el encabezado “Recomendación” expresa que “Evite el consumo de alcohol si está embarazada o sospecha estarlo. Tomar alcohol en el embarazo afecta al bebé, causa retraso mental permanente y daño severo en órganos como el corazón, cerebro y riñones, causando el síndrome alcohólico fetal”.

Elías Tejada Read, coordinador del Clúster de Alcohol y director del Programa de Alcohol y Drogas del Departamento de Salud Mental del Ministerio de Salud Púbica, elogió al centro comercial por acogerse a la campaña que desarrollan para prevenir el consumo de alcohol entre embarazadas.

Destacó como un elemento positivo que esa tienda colocara la advertencia en el mes dedicado a las madres, debido a que algunas mujeres podrían sentirse tentadas a brindar con un trago de alcohol al enterarse que pronto serán mamás.

Tejada Read reveló que en reuniones que han tenido con empresarios de la industria licorera, estos se mostraron impactados con las informaciones que les transmitieron sobre los severos daños que puede causar a los bebés el consumo de alcohol durante el embarazo.

Expresó su esperanza de que otros centros comerciales se sumen a la campaña de concienciación, debido a que el compromiso social con esta causa no es exclusivo del Clúster de Alcohol y del Ministerio de Salud Pública.

“Es un gran paso respecto al compromiso social que anhelamos de estas empresas. Estos niños vienen con una condición que no es genética, sino provocada por la madre que consume bebidas alcohólicas durante la gestación”, dijo Tejada Read.

EL SÍNDROME

Los hallazgos de daños neurofisiológicos en bebés cuyas madres ingirieron alcohol durante el embarazo son cada vez más frecuentes en las maternidades San Lorenzo de Los Mina y Nuestra Señora de la Altagracia, principales centros maternos infantiles del sector público en el país y donde se aplica el programa para prevenir el SAF.

Los especialistas advierten que los hijos de las embarazadas que consumen alcohol nacen adictos y dependientes.

Llaman a romper con los mitos de que una copa de vino no hace daño y de que la cerveza contribuye a que el bebé nazca limpio, ya que por el contrario podrían provocar daños neurológicos irreversibles en la criatura.

El SAF es un trastorno del desarrollo que afecta a los hijos de madres que abusan del consumo de alcohol durante el embarazo o antes de la gestación, con consecuencias físicas, intelectuales y de conducta para el recién nacido.

Problemas de aprendizaje en niños podrían estar incluso asociados al consumo de alcohol de las madres durante el embarazo.

En el primer trimestre del embarazo hay un mayor impacto en el proceso de desarrollo del neonato y es el tiempo en que pueden surgir las discapacidades